Túneles
La ciudad esconde historias bajo tierra
Hay leyendas urbanas que afirman que la ciudad de San Miguel de Tucumán está plagada de túneles bajo tierra que conectan míticos edificios.
Captura web.
Cada ciudad tiene sus historias de sucesos que ocurrieron hace décadas atrás y, todavía, son un gran misterio para la sociedad. Jorge Soria es un tucumano aficionado a las historias de terror y situaciones poco convencionales.
Una anécdota se le viene a la mente y se remonta a la historia de los primeros años del siglo pasado: “Me acuerdo de la polémica que se armó cuando un colectivo hizo un hueco en el pavimento en la calle Córdoba antes de llegar a 25 de Mayo”, indica. “Según un ingeniero, fue por un drenaje de vieja data y automáticamente lo negué dentro de mi cabeza”, agrega. ¿Cuál es, entonces, su argumento? Los viejos túneles que pasaban por debajo de las calles céntricas.
“Según lo que se sabe, en los primeros años del siglo pasado, la mayoría de las viejas casonas tenían pasadizos para ocultar a miembros de la servidumbre”, explica, no sin dejar de mencionar que esa palabra le parece despectiva.
El tucumano está convencido de que estos pasajes tenían como objetivo ser corredores que conectaban la cocina y el despensero con el comedor del hogar: “Eran grandes y anchos ya que las familias tenían varios hijos y siempre recibían visitas ilustres desde otros puntos de la provincia”, comenta.
En el caso del pozo de la calle Córdoba, se puede deducir que se trataría de un pasadizo construido con la finalidad de comunicar un edificio con otro y fuera inaugurado alrededor de la década del 30. “Ese túnel sería un anexo entre el Correo de Tucumán y algún edificio de la zona”, explica Jorge. Se cree que también hay túneles que unen la Casa de Gobierno con las iglesias de San Francisco y Santo Domingo.
Sin embargo, este fanático de los mitos urbanos afirma que sí hay algunos túneles que fueron excavados y unían a los edificios cercanos. “Los túneles que conectaban el Colegio Nacional, el exhotel Savoy (actual Casino), el Teatro San Martín y el edificio que albergaba a la vieja Brigada de Investigaciones son verídicos”, concluye.
En la casona donde funciona la Federación Económica de Tucumán hay una escalinata que lleva a un túnel, a mano derecha del zaguán principal de la casa. El pasadizo tiene una altura de 1,80 metros, que comunica con la parte final de la casa. “Era utilizado por el personal que abastecía los víveres y por los empleados del hogar”, afirma el arquitecto Ricardo Viola, quien fue el encargado de una de las tantas refacciones a la vivienda.
La ciudad está plagada de mitos y leyendas que esperan ser desenterradas. Mientras tanto, estos oscuros pasadizos seguirán guardando secretos hasta que alguien se anime a develarlos.