“Este ‘tatuaje’ me hice hace aproximadamente hace seis meses con un tipo que dice ser tatuador, y que también dice llamarse Nacho Jamardo. No lo pagué barato, no busqué lo económico. La intención era hacerme una víbora (aclaro, porque no se nota)”, así comenzó el relato de Aixa Moyano, una joven tucumana que denunció, en su cuenta de Facebook, un tatuaje mal realizado.

El posteo está ilustrado con fotos de su mano, en donde se puede apreciar los temblorosos trazos de aquel dibujo que debía ser una serpiente y terminó siendo “una lombriz”, como lo define su portadora.

El pésimo trabajo fue realizado por el tatuador Nacho Jamardo, señalado como el autor directo de esta nefasta obra. Lo llamativo de la situación fue que muchos otros damnificados comenzaron a comentar la publicación, animándose a mostrar sus fotos y contar sus experiencias, para concientizar a las demás personas sobre la elección del tatuador.

“Lo que más me acuerdo es que me respondió, de una forma soberbia y muy desagradable, que eso negro se formaba en todos los tatuajes de los dedos, y que ya se me iba a ir, y cuando eso pase le iba a rogar perdón, o algo así. Obvio, me dio mucha bronca”, recordó Aixa. “La piel de la mitad del dedo se volvió de color verde oscuro, evitando contar detalles, como por ejemplo que sin querer me hizo un lunar en el dedo que le sigue. Algo de por vida, que hasta el día de hoy estoy tratando de borrar con láser, lo que duele incalculablemente. Ya que no se como seguir calificándolo, es mejor mostrarlo. Publico esto (después de seis meses) para que a nadie más le pase”, finalizó Aixa su sorprendente relato.

Belen Del Carril fue una de las chicas que sumó su declaración. “A mí me pasó lo mismo, me tatuó re mal, una letra más gorda que la otra, chueco ¡horrible! Si alguien sabe en dónde sacan con láser que me avise por favor”, escribió junto a la foto de su tatuaje.

Flor Caballero, exclamó ser otra damnificada, y acompañó sus dichos con una foto comparativa entre el diseño original y el que quedó  finalmente grabado en su piel. Una suerte de “expectativa vs realidad”.

Otra denunciante fue Floor Ruiz, quien aceptó ser una más de los “desastres que hace este vago”.  Flor relató el proceso de su encuentro con el tatuador. Se realizó un dibujo en la espalda y gracias a una amiga que la fotografió pudo verificar recién el error en el dibujo: “Le mandé la foto por Whatsapp con una bronca impresionante porque me había arruinado la piel a lo que me contestó que tenía que esperar que se deshinche. Luego me dijo que me iba a dar un turno especial para retocarlo. Fui a la semana siguiente, me volvió a lastimar y quedó casi igual a lo que tenía”, expresó. “La verdad no tiene cara, se fue de vacaciones con la plata de todas las personas que les arruinó la piel”, sentenció.

Según las chicas perjudicadas, muchas de ellas eligieron a Nacho Jamardo porque la mediática modelo, Lucía Rossi, se había tatuado con él. Pero la rubia también sufrió las consecuencias de la negligencia del tatuador. Junto a una foto de su mano, comentó: “Las cicatrices en las letras y el dedo verde. La espalda aún no me saqué foto pero el trazo....y las letras no eran ni siquiera como quería. Mi hijo las hace mejor”, arremetió.

Los varones también fueron víctimas. Franco Garcilazo Bauque contó que le “destrozó el brazo”. “Miren la horrenda cicatriz que me dejo en mi antebrazo. El tattoo está arreglado ahora y aún falta pintarlo de nuevo. No saben lo que era el tatuaje, todo improlijo mal pintado y lastimado. Me enterraba la aguja y la máquina en mi brazo. Me da mucha bronca que siga tatuando y destrozando la piel de las personas”, comentó.

Como si fuera poco, comenzó a circular un audio en donde se escucha la supuesta voz del tatuador amenzando a un cliente disconforme. Se escucha: “Te voy a buscar y te voy a romper la espalda, te lo juro por Dios, te voy a hacer recontra cagar", entre gritos.

No todo quedó en denuncias, luego de lo sucedido, Nacho Jamardo, desde su cuenta de Facebook, realizó un descargo. Entre sus dichos, arremete contra Aixa y demás denunciantes. “Sale a hablar gente que ni siquiera tatué yo, con laburos que no son míos, es una cagada que haya gente que se les una y encima de todo eso me vengan con tatuajes que ni siquiera hice yo. Esto pasó hace medio año quizás y justo ahora esta piba rayadísima me quiere escrachar, vamos. Me retiro y qué decirles, ‘la verdad surgirá’ suerte. Buen día”, expresó.

El tatuaje es una marca imborrable. Si te lastiman, la tinta se va pero la cicatriz queda. Informate antes, sobre tatuadores capacitados, productos utilizados, higiene y asepsia. Elegí un diseño que te conforme y una vez asegurados estos parámetros, sumergite en la experiencia única de pintar tu piel.

Y a vos, ¿Te pasó alguna vez arrepentirte de un tattoo o quedar disconforme con el tatuador? Dejanos tu comentario.